En esta nueva Ley inicialmente se plantea que las personas que teletrabajo tendrán derecho a un "horario flexible", que los costes de este trabajo los asumirá la empresa en su totalidad, también se propone que el trabajo a distancia sea voluntario por el trabajador/a y que requerirá acuerdo de trabajo a distancia, y se estipula un trato igualitario y con los mismos derechos que el resto de la plantilla.
En cuanto las horas de trabajo, será necesario que queden reflejadas en un registro horario, como puede ser timenet, que muestre claramente el tiempo que se ha dedicado, este deberá incluir obligatoriamente el momento en el que se inicia y en lo que se finaliza la jornada de trabajo, también las pausas, y/o los tiempos de preparación, desactivación, etc.
Un punto importante es el derecho a la desconexión digital de las personas que trabajan a distancia, particularmente en teletrabajo, y apela a la negociación colectiva o acuerdo de empresa con el objetivo es evitar el llamado 'smart working' (trabajo en cualquier momento y en cualquier lugar). Sin embargo, el texto indica que el control de la actividad corresponde a la empresa.
Finalmente comentar también que el gobierno ha accedido a desatar el teletrabajo de la conciliación, para evitar que acabe siendo utilizado como una forma de perpetuación de los roles de crianza y cuidado de los hijos/as sobre las mujeres.