Todos recordaremos la pandemia, momento en el que por necesidad y obligación la gente tuvo que trabajar desde casa, descubriendo así a muchos que podían realizar el mismo trabajo ahorrándose el desplazamiento a la oficina y las horas fuera de casa.
Cuando la pandemia acabó, muchas empresas obligaron a sus empleados a volver a las oficinas, una polémica que ha enfrentado a las compañías con sus trabajadores y que incluso ha desatado despidos masivos.
Cada parte tiene sus propias valoraciones sobre el teletrabajo, muchos están a favor y otros muchos en contra, pero resulta interesante escuchar las motivaciones de aquellos que ven más de cerca los efectos de trabajar desde casa.
Uno de los sectores en los que más se ha aplicado el teletrabajo es el tecnológico. Sam Altman, CEO de OpenAI, empresa creadora de ChatGPT y uno de los referentes del sector, ha compartido su opinión sobre este debate y ha dicho que implementarlo fue un error, Altman defiende su posición argumentando que el teletrabajo no favorece en absoluto la comunicación a las empresas, lo que impide que surjan ideas nuevas y brillantes, sus principales argumentos son los siguientes:
- Aislamiento profesional y social: La falta de interacción directa con los compañeros puede afectar a la salud emocional de los trabajadores y la cohesión del equipo.
- Dificultades para separar la vida laboral de la personal: Sin una oficina física, algunos empleados pueden tener problemas para desvincularse del trabajo, afectando así a su equilibrio entre vida laboral y personal.
- Riesgo de agotamiento: La flexibilidad puede dar lugar a jornadas laborales más largas, especialmente sin una estructura de horarios fijos.
- Dificultades de gestión y supervisión: Puede ser difícil para los directivos supervisar y evaluar el rendimiento de sus equipos a distancia.
- Ciberseguridad: El trabajo a distancia plantea retos adicionales a la hora de proteger la información confidencial y prevenir ciberataques.
De este modo, tanto Altman como Elon Musk o Mark Zuckerberg son magnates que se muestran en contra del teletrabajo, mientras que otros como Bill Gates están a favor, e incluso defienden semanas laborales de cuatro días.